lunes, 30 de mayo de 2016

Azul.

Siempre ha habido sitio para mis olas de tinta en tu mar de dudas pero yo ya he escrito todo esto y no me apetece volverlo a vivir.
Casi se me había olvidado lo horrible que es nadar en todo tu azul. Partamos de mi falta total de paciencia para explicar que yo necesito saber, que por eso escribo.
Que a mí no me gusta tener que deshojar margaritas, que me gustan las flores con pétalos y tú haces que me deshoje.
No sabría explicar porqué pero sigues teniendo en mí ese efecto que hace que pueda llevarme la vida haciéndote metáfora con el azul del mar, y no quiero, y me niego pero regreso con la incertidumbre del que, sin saber porqué, vuelve a volver a no saber.